Las bolas de nieve son un elemento increíble en la decoración y más de uno nos hemos quedado alucinados mirando cómo caían los copos de nieve en más de una ocasión. Hay de muchas formas, tamaños y diseños interiores. ¿Te imaginas poder hacerla tú mismo en casa y decorarla como más te guste? Podría formar parte de tu decoración navideña o para llevar como detalle a una comida familiar. Además, si tienes peques en casa, les encantará tener a sus personajes favoritos en la nieve. Sobre todo si aparecen en Frozen…
A continuación te mostramos cómo hacer una bola de nieve casera. ¡Fácil y con pocos materiales!
Material que necesitarás:
- 1 tarro de cristal con tapa de rosca.
- La/s figurita/s que quieras introducir en el tarro (legos, figuras de plástico de animales, de navidad…).
- Pegamento fuerte o silicona.
- Purpurina.
- Bolitas de porexpán pequeñas o bien trocitos de plástico blancos (puedes cortar un vaso blanco de plástico en trocitos muy pequeños).
- Agua.
Haz la bola de nieve paso a paso:
- Separa la tapa del tarro.
- Pega en la parte interna de la tapa la base del muñeco con el pegamento o la silicona. Déjalo secar.
- Llena el tarro con agua, hasta 3/4 de su capacidad.
- Añade las bolitas de porexpán o trocitos de plástico, y la purpurina. Puedes añadir la cantidad que desees, pero te recomendamos que vayas añadiendo progresivamente según veas cómo queda. Una vez finalizado podrás volver a añadir más producto, así que no conviene echar demasiado al principio.
- Añade más agua hasta que el tarro esté casi lleno.
- Ciérralo con la tapa (con el muñeco incorporado), es normal que se pueda verter un poco de agua en ese momento. Asegúrate que queda bien fijado y gíralo.
- ¡Agita y observa la magia! Puedes crear múltiples diseños y decorar el exterior del bote como más te guste. ¿Te animas a probarlo?
A continuación te mostramos algunas ideas de diseños que podrían inspirarte.
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