Si tus objetos de bronce han perdido el brillo y color original, conseguirás recuperarlo con este fabuloso truco. Necesitarás muy pocos ingredientes y lo harás de manera natural.
Para que tus objetos de bronce recuperen el lustre de antaño prueba a limpiarlos con un paño humedecido en una mezcla de agua, zumo de limón y amoníaco a partes iguales.
¡Conseguirás abrillantar el bronce y hacer que reluzca como el primer día!
Todo ello sin dañar el material. Toma nota de este truco y llévalo a la práctica, te sorprenderá. ¡Cuéntanos cómo te ha ido en los comentarios!
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